Las 6 peores excusas para no abrir YA tu canal de YouTube

Tú, ¡sí, tú!, tú, que me estás leyendo ahora, debes de haber llegado a parar a este blog por alguna razón, ¿no?

Vale, sí, puede que simplemente el titular de este artículo haya llamado tu atención en Twitter, o que un amigo haya compartido la entrada en Facebook y hayas decidido pinchar en el enlace para romper un poco con la rutina.

Pero si te has quedado leyéndome; si, incluso, ésta no es la primera vez que te pasas por aquí… es probable que tengas un mínimo interés en la comunicación eficaz, ¿verdad?

Incluso es posible que, con todo lo que te cuento en TeComunicas cada semana, te hayan entrado las ganas de abrir un canal de YouTube para tu negocio digital.

Si es así, déjame que te formule una pregunta:

¿POR QUÉ NO HAS ABIERTO YA TU CANAL DE YOUTUBE?

Una más:

¿Por qué sigues aplazando el momento de generar tus propios vídeos y conectar con tu audiencia de una forma mucho más humana que a través de la palabra escrita?

Y otra:

¿Cuáles son las excusas que te estás poniendo a ti mismo para no estar YA enfrente de una cámara en vez de estar leyéndome a mí?

Por esta vez (¡sólo por ésta!), voy a pensar yo por ti y te voy a dar la respuesta a estas preguntas.

En realidad, te voy a dar seis respuestas. Porque en este artículo te presento las 6 peores excusas que te estás poniendo para no abrir tu canal de YouTube de una vez por todas.

¿Preparado para que te lea la mente? ¡Vamos allá!

Canal de youtube para negocio 2.0

Las 6 peores excusas para no abrir YA tu canal de YouTube

#1 No quiero exponerme demasiado

La primera excusa para no abrir tu canal de YouTube que probablemente te habrás puesto más de una vez es la de que no quieres exponerte demasiado.

No quieres que te vean la cara ni el cuerpo; que oigan tu voz, tus titubeos y muletillas; que a través de tu lenguaje no verbal los demás adivinen tus emociones…

Detrás del no querer exponerse existe un claro miedo: el miedo a ser juzgado negativamente.

Pero tú ya sabes que no puedes gustar a nadie, ¿verdad? ¿O te lo voy a tener que recordar? 😉

En un negocio tradicional puedes mantenerte seguro y protegido detrás de tu mostrador o de la mesa de tu despacho.

Pero en los negocios digitales las reglas del juego cambian. Cuando el arma preferida para competir es la palabra escrita, quien opte por la imagen en movimiento saldrá ganando sí o sí.

Porque sí: en el vídeo te expones, pero esa exposición no es necesariamente negativa.

Al contrario: es cierto que al exponerte sales de tu guarida y te muestras tal y como eres, pero tú sigues teniendo el poder de decidir hasta dónde llega tu “yo profesional” y empieza tu “yo personal”.

No hace falta que cuentes tu vida en internet. Sólo siendo tú en movimiento ya estarás aumentando la cercanía con tus lectores.

 

#2 En YouTube no hay hueco para mí

Puede que pienses que sólo existen dos clases de youtubers: los que se forran a base de exprimir un humor rematadamente absurdo (el famoso Rubius sería un ejemplo) y los serios profesionales que, amotinados tras un sobrio escritorio y habiendo colgado todos sus títulos en la pared de detrás, largan durante horas con una letanía capaz de dormir al más despabilado.

Si has trazado esta división en tu mente, es normal que no quieras pertenecer al clan YouTube.

No quieres ser un carca estirado que aburre hasta a las moscas, pero tampoco convertirte en ese payasete que hace reír a todos sin sentido.

Amplía el abanico. Entre el humorista y el señor-carca se extiende una amplia escala de grises. Sólo tienes que encontrar en cuál de esas tonalidades encaja tu manera de comunicar y lanzarte al ruedo.

Otra excusa desmontada para abrir tu canal de YouTube. ¿Quieres más? Sigue leyendo.

 

#3 No sé por dónde empezar

Cuando me planteé rodar Léeme, yo no tenía ni repajolera idea de grabar vídeos.

Bueno, miento: algo recordaba de la carrera, pero desde luego no era lo suficiente como para obtener un resultado mínimamente decente con el programa.

Es muy fácil quedarte bloqueado y tirar la toalla cuando no sabes cómo empezar a hacer algo. Pero, en el fondo, esa inacción es una excusa que te pones a ti mismo porque romper tus propios límites te da una pereza que te mueres.

¿O no es así?

Pues deja de ser condescendiente contigo mismo y ponte al lío.

¿Qué hacer cuando no tienes ni idea de cómo empezar a crear tu canal de YouTube?

  • Pregunta a la gente que sabe más que tú: no me trago que no tengas ningún amigo que controle el campo audiovisual y que pueda darte un par de consejillos para empezar.
  • Invierte en formación: ya sabes que yo estoy aquí para ayudarte en todo lo relativo a comunicación eficaz en vídeo y en público. Lo técnico no entra en mis competencias principales, pero si tienes dificultades también puedo echarte un cable.
  • Prueba, equivócate y aprende del error: los niños aprenden a caminar a base de caerse de morros al suelo una y otra vez. Cada vez que caen, en vez de llorar, se levantan y vuelven a intentarlo. ¿Qué tal si pruebas el “método bebé” con tus vídeos?

Para empezar algo no hace falta saber hacia dónde dirigir el primer paso. Sólo es necesario dar ese primer paso. Él es el que contiene todas las respuestas.

 

#4 Todo lo que tengo que decir, ya lo digo en mis artículos

Es un error pensar que los artículos y los vídeos son equivalentes.

No lo son.

En un artículo puedes exponer un contenido, explicar unas ideas y darles un formato tipo periódico o blog.

En un vídeo puedes exponer ese mismo contenido, explicar esas mismas ideas y, además, mostrar al emisor del mensaje (o sea, tú) tal y como es, con su voz, su cuerpo y sus emociones apoyando y enriqueciendo el mensaje que las palabras trasmiten.

El formato vídeo aporta un valor añadido que el artículo escrito nunca alcanzará. Y te lo dice alguien que ama leer por encima de todas las cosas.

Ese valor añadido es inabarcable: es emoción, cuerpo, voz, mirada, gestos, silencios, ritmos y velocidades, musicalidad, risa, cercanía, humanización…

No es lo mismo leer una obra de teatro que verla viva sobre el escenario, ¿verdad?

Pues eso.

Además, el vídeo puede contener un artículo entero o complementar un artículo escrito ampliando la información que ya das con palabras escritas.

La excusa de que todo lo que tienes para contar ya lo cuentas en tus artículos no sirve para no abrir tu canal de YouTube, porque el vídeo relata tus ideas, pero también añade mucho más.

 

#5 La cámara no me quiere

Creo que “la cámara te quiere” y “la cámara no te quiere” son dos de las frases que más daño han hecho a la autoestima de la humanidad occidental contemporánea.

Pero no se trata sólo de autoestima: la dichosa frasecita en negativo funciona como excusa perfecta para todos los que queréis (pero no queréis) empezar a grabar vuestros propios vídeos.

Es normal que no te veas natural en tus primeros vídeos. Incluso es perfectamente normal que te dé vergüenza verte y escucharte.

La cámara es un medio desconocido para ti, al igual que lo era Skype cuando empezaste a utilizarlo, y ahora te llevas con él a las mil maravillas.

Pero si tiras la toalla porque no te ves natural a la primera, entonces no le eches la culpa a la cámara diciendo que no te quiere.

El que no te quieres eres tú a ti mismo. Es duro leer esto, pero no te preocupes, porque hay solución.

Y ¿sabes qué? Una de las soluciones es grabarte y verte, grabarte y verte. Así una y otra vez.

Porque en cada una de esas prácticas te estarás familiarizando con tu manera de hablar, de gesticular, de mirar a la cámara, etc.

Y llegarás a gustarte. Te lo digo yo, que he estado ahí y ahora me soporto bastante bien 😉

Fuera la quinta excusa. ¿Queda alguna? ¡Ah, sí! Se me olvidaba…

 

#6 A nadie le van a interesar mis vídeos

Bueno, bueno. No me digas que estás reviviendo los miedos que tuviste cuando lanzaste tu negocio digital y pensabas que ni tu madre iba a leer tus artículos.

Con el tiempo has aprendido que la visibilidad en internet se obtiene con mucho trabajo y perseverancia distribuidos en:

Y un largo etc.

Si ya eres bastante visible en internet, sabes que el camino no ha sido fácil, pero reconocerás que te lo has pasado bastante bien, ¿verdad?

Y, si todavía estás en ese camino de la visibilidad, estarás conmigo en que es necesario conocer e implementar distintas estrategias para alcanzar tus objetivos.

El vídeo es una de esas estrategias. Pero no cualquier tipo de vídeo: un vídeo en el que tú seas quien da la cara y quien comunica de forma eficaz desde tu autenticidad y tus valores capitales.

Claro que tendrás que currarte la difusión de tus vídeos. Tendrás que devanarte los sesos buscando nuevos canales de distribución para ser más visible en internet.

Yo lo hago cada día. Éste es un camino que no termina nunca.

Pero te garantizo que los vídeos van a aumentar tu visibilidad, sea cual sea el nivel de ella que tengas ahora.

Estamos en un momento en el que el vídeo en los negocios digitales no está 100% extendido (ni remotamente), por lo que quien lo ponga en práctica se va a diferenciar rápidamente de la competencia.

¿Quieres ser tú uno de los pioneros en el vídeo digital?

Tus vídeos se van a ver. Tendrás gran parte de responsabilidad en ello, pero si perseveras y trabajas tu comunicación, el objetivo llegará.

 

Di adiós a tus excusas y ponte manos a la obra con tu canal de YouTube

Nadie dijo que fuera fácil. Pero, hasta que no te pongas a ello, no comprobarás lo mucho que puedes llegar a dar de ti mismo como comunicador.

Cuando más practiques y te atrevas, más seguro te sentirás ante la cámara y menos excusas quedarán en tu repertorio.

Pero lo mejor es que el entrenamiento en comunicación eficaz y en creación de vídeos te va a ayudar a cultivar unos valores que luego podrás poner en práctica para mejorar el global de tu web.

Practicando la comunicación eficaz y creando un canal de YouTube en el que subir los vídeos de tu negocio digital practicarás la perseverancia, la flexibilidad, la empatía, la paciencia y el aprendizaje.

Da el salto. Si sientes que te vas a caer, aquí estoy yo para ayudarte a levantarte de nuevo 😉

———————————————————

Ahora sí que ya no me quedan más excusas. Pero probablemente me estaré dejando alguna en el tintero…

¿Cuáles se te ocurren a ti? ¿Qué excusa te estás poniendo para no lanzar ya tu canal de YouTube? ¿Cómo crees que podrías derribar esas excusas? ¡Cuéntamelo todo en los comentarios!

 

Irene
irene@tecomunicas.com

Apasionada de la literatura, especialista en copywriting y storytelling. Comunicadora nata. Quiero que te vuelvas a enamorar de tu negocio literario y lo haré poniendo mis herramientas a tu servicio para que aumentes tus ventas y consigas clientes recurrentes.

14 Comments
  • Javi
    Posted at 09:45h, 27 octubre Responder

    Hola Irene,

    Me siento bastante identificado con lo que expones en el artículoa. En mi caso llevo varios meses dándole vueltas al tema del vídeo. Es una idea circular, de esas que te olvidas de ella, pero vuelve una y otra vez.

    Mi excusa particular es…la técnica: porque quiero hacer vídeos lo más profesionales posibles.
    Que si la cámara, que si el fondo, que si la iluminación, que si el sonido, que si el programa de edición…

    Es que el mundo 2.0 nos está forzando a tener unos conocimientos bestiales a todos los que nos acercamos al «hazlo tú mismo», porque tenemos que saber «de los nuestro» y luego de lo necesario para sobrevivir en la red, es decir: seo, redes sociales, vídeo marketing, copywriting, redacción, edición de imágenes…

    Si un autónomo antes ya era «todo terreno», ahora tiene que ser un vehículo anfibio capaz de volar por tierra, mar y aire.

    Saludos

    • Irene
      Posted at 10:19h, 27 octubre Responder

      Hola Javi! Gracias por pasarte por aquí.

      Pues en el tema del vídeo suele pasar esto: sabemos que tenemos que hacerlo, pero por lo que sea no nos atrevemos a dar el paso. Yo te animo a que lo hagas, porque si no la idea te va a estar martilleando la cabeza por los tiempos de los tiempos y te va a robar una energía que necesitas para aprender todo eso que has dicho y más (tienes toda la razón: los autónomos 2.0 tenemos que ser humanos-orquesta).

      Gracias por aportar la excusa de la técnica. Aun así, ¡tampoco me vale! 😉 Con un equipo relativamente barato puedes grabar vídeos profesionales. Hay gente que graba videotutoriales con móviles Samsung y nunca dirías que están grabando con teléfono móvil. En cuanto al sonido, un micro de corbata de calidad te sale por 25€ o menos. En iluminación, busca luz natural siempre que puedas; en cuanto al fondo, busca o crea un fondo que identifique tu negocio o que sea neutro).

      Un saludo y a por todas!

  • Ana Vico
    Posted at 14:09h, 27 octubre Responder

    Ay, Irene, que una vez más me has pillado 😛

    Me siento totalmente identificada con ese «tú, sí tú» del principio. ¡Creo que reúno todas las excusas que has puesto! jajaja.

    Estoy trabajando contra esos pensamientos que no me ayudan porque de verdad quiero pasar mi negocio online al siguiente nivel y aparecer en vídeo prontito. Te sigo de cerca y trabajo constantemente para combatir esas excusas y tú las has sabido desmontar muy pero que muy bien. ¡Ya están pulverizadas!

    Lo comparto ahora mismo porque es buenísimo. Sigue motivándonos y poniéndonos en marcha, que algunos lo necesitamos 😉

    Un abrazo

    • Irene
      Posted at 14:43h, 27 octubre Responder

      Hola Ana! Eso es, estás en el camino! Si es que todos nos ponemos excusas para todo… lo importante es que nos demos cuenta de que están ahí y romper con ellas! Pero yo ya no digo más, ahora os toca a vosotros detectar las excusas y hacerlas picadillo =)

      Un abrazo, y gracias por compartir!

      Irene

  • Pingback:El gran truco para acabar con los nervios ante la cámara
    Posted at 08:10h, 30 octubre Responder

    […] Las 6 peores excusas para no abrir YA tu canal de YouTube [LEER] […]

  • Pingback:No me extraña nada que pases de sacrificarte - TeComunicas
    Posted at 08:27h, 30 octubre Responder

    […] Las 6 peores excusas para no abrir YA tu canal de YouTube [LEER] […]

  • Pingback:Ríndete: Tú NO puedes gustar a nadie - TeComunicas
    Posted at 11:50h, 27 noviembre Responder

    […] Porque a todos nos gusta que nuestras ideas sean valoradas y halagadas. […]

  • Pingback:Los 7 errores de hablar en público... y cómo solucionarlos
    Posted at 21:08h, 28 noviembre Responder

    […] caso es que siempre vas a tener una excusa para no hablar en público. Pero ¿te has preguntado cuántas razones tienes para sí […]

  • Elia
    Posted at 23:48h, 04 febrero Responder

    Ups! Cuánta razón!

    Yo tengo claro que es mi asignatura pendiente pero no hay manera de lanzarse. Mi excusa favorita es la 3, y como no sé por dónde empezar, pues ahí lo voy dejando a ver si algún día se me ocurre cuál es el primer paso…

    Gracias por tu artículo!

    • Irene
      Posted at 12:55h, 06 febrero Responder

      Hola, Elia!

      Bienvenida al blog! Te pregunto: Si supieras por dónde empezar, ¿por dónde sería? Seguro que se te ocurre alguna respuesta… 😉

      Un abrazo!

      Irene

  • Juan David Corrales
    Posted at 20:01h, 29 marzo Responder

    Hola Irene!

    Me llamó la atención un comentario tuyo en otro blog ( http://viviralmaximo.net/como-funciona-el-mundo/ ). Me eché una ojeada por tu página y la verdad me ha llamado mucho la atención las cosas que menciones.

    Estaré pendiente de tus publicaciones y estoy seguro que antes de que termine mi actual carrera ya tendré mi propio negocio 2.0( aunque no haya leído lo suficiente respecto a esto, pero se me hace la idea que trata sobre el negocio del futuro) en fin, muchos éxitos

    att Juan David Corrales

    • Irene
      Posted at 15:37h, 30 marzo Responder

      Hola Juan David!

      Me alegro de que te guste mi web. Espero que te sea útil lo que puedas encontrar en ella. No leer mucho sobre algo a veces es una buena opción… caer en la sobreinformación tampoco es lo más conveniente!

      Un abrazo y ánimo con tus proyectos!

      Irene

      • Juan David Corrales
        Posted at 16:21h, 30 marzo Responder

        Gracias Irene, tendré en cuenta tus consejos para poder ir reforzando mis conocimientos.

  • Pingback:¡YouTuber a los 46.. - Liderazgo Arriba | Blogs El Tiempo
    Posted at 21:42h, 18 enero Responder

    […] De todas formas, el miedo continuaba y como siempre sugiero hacer, me senté a conversar con él – con el miedo, no con Daniel- , y empecé con la pregunta: “¿de qué me quieres proteger?  Y busqué nuevamente en google y encontré algo definitivo: Las 6 peores excusas para no abrir ya tu canal de YouTube. […]

Post A Comment